Efecto de la multimorbilidad en la velocidad de marcha de los adultos mayores en comunidad

Resumen

La velocidad de marcha (VM) en adultos mayores representa una herramienta práctica, simple y confiable para medir la función física en los adultos mayores. Se la considera como un predictor de futuros eventos adversos como discapacidad, deterioro cognitivo, institucionalización, caídas y muerte, por lo que se le ha denominado el “quinto signo vital” que se debe evaluar en todo adulto mayor, tanto en el ámbito comunitario como institucional.

El instituto de Gerontología inició los estudios sobre VM con el estudio “Velocidad de la marcha en adultos mayores de la comunidad en Lima, Perú” publicado en la Rev Med Hered 2009; 20: 133-138, donde se determina que la VM promedio es de 0.92 m/s, siendo menor en personas de edad avanzada y de sexo femenino. Posteriormente se publica el estudio “Velocidad de la marcha como indicador de fragilidad en adultos mayores de la comunidad de Lima, Perú” en la Rev Esp Geriatr Gerontol 2010; 45(1): 22-25, donde se determina que el punto de corte de la VM que predice fragilidad en nuestra población es de 0,7 m/s.

Dado que la multimorbilidad, o la coexistencia de más de una condición crónica, es característica de esta población y que genera secuela, limitación funcional, discapacidad y dependencia, se plantea el objetivo de determinar el efecto de la multimorbilidad sobre la VM en adultos mayores de la comunidad, que se mantengan físicamente funcionales. La guía NICE del 2016 sobre multimorbilidad: “Multimorbidity: clinical assessment and management”, nice.org.uk/guidance/ng56, establece que todo adulto mayor con multimorbilidad  requiere la determinación de su capacidad física y recomienda utilizar la VM como paso inicial. 

Para ello se evaluó a 265 participantes del distrito de San Martin de Porres, excluyendo a aquellos con dependencia funcional, con dificultad para realizar la medición de VM, aquellos con depresión y con deterioro cognitivo. Se registró la VM con un cronómetro calibrado midiendo el tiempo tomado por cada participante para caminar, a una velocidad usual, una distancia de 8 metros de un total de 10 en dos oportunidades, tomando el mejor registro como válido. La multimorbilidad se definió como la presencia de dos o más enfermedades crónicas.  La media de edad de los participantes fue de 68 años y 54% fueron mujeres. La frecuencia de enfermedades crónicas fue de 38% de hipertensión, 29% de enfermedades reumatológicas, obesidad en 17% y diabetes en 14%. Se encontró una diferencia de 0.24 m/s entre los adultos mayores sin condiciones crónicas con aquellos con 3 o más de ellas, con una reducción exponencial de la VM según la presencia de cada comorbilidad hasta de -0.2 m/s en aquellos con más de tres enfermedades crónicas. Se concluye que la VM se reduce conforme el número de comorbilidades aumenta a pesar de mantener la funcionalidad. Por ello, el rol de la velocidad de marcha para monitorear el estado general de salud de los adultos mayores con multimorbilidad debe incluir a aquellos sin dependencia funcional.